viernes, 27 de febrero de 2015

Cuando traté mal a Raphael

En 1981 recibí en mi oficina a un joven talentoso que representaba a Raphael, el cantante español que prácticamente había desaparecido de los escenarios por varios años. Por algún motivo lo confundí con Manuel Alejandro, el gran compositor de temas inolvidables como Señora (Rocío Jurado), Háblame del mar marinero (Marisol), Digan lo que digan, Cuando tú no estás (Raphael). Yo era Subgerente Ejecutivo del hotel Camino Real-Biltmore de Guatemala. El supuesto compositor buscaba auspicio para el lanzamiento mundial del nuevo disco de un Raphael reloaded, y deseaban hacerlo en el salón más grande de Centroamérica, que era el salón Camino Real del hotel homónimo. Me entregó un acetato para que lo escuchara, como en efecto lo hice más tarde. Eran unas canciones horribles, cansinas, repetitivas... Ese disco y el proyecto entero iban a ser un fracaso, de modo que rehusé dar el auspicio. Finalmente se lanzó este LP, no sé si en Panamá... Y fue un estruendoso éxito con canciones como Estar enamorado es, y otras por el estilo. Pido perdón al maestro desde este humilde blog. Raphael grabó las canciones ecuatorianas Sombras (con letra de la poetisa mexicana Rosario Sansores), y Vasija de Barro. En 1982 Raphael recibía un simbólico disco de uranio por la venta de más de cincuenta millones de discos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario